abracemos las políticas publicas que ayudan a la evolución de los sectores vulnerados y aborrezcamos los títulos tan largos
yo tengo fé, tengo esperanza en el mundo y en cómo vamos a avanzar
soy fiel creyente de que toda acción que nace desde la empatía lleva consigo una carga de divinidad y llega aún más que cualquier otra cosa
sé que cada cosa que hacemos repercute, bien o mal, en alguien.
y yo quiero repercutir bien, en la gente y el ámbito que me importa.
me interesa la educación, y sobre todo, los sectores más vulnerados en relación a esta misma. me interesa la gente, la gente que tiene hambre, que tiene frío, me interesa saber qué hacer, para que eso cese, por lo menos un poquito.
estudio para eso, literalmente.
me gusta esta esperanza que subyace en cada unx
me interesa revalidar a las personas con discapacidad como sujetos de derechos y, como todo ser habitante en la sociedad, sujeto POLÍTICO. me agota ver cómo vulneran sus derechos y, más aún, cómo son otrxs lxs que salen a pelear por ellxs: no está mal, obvio, es hermoso, divino, una muestra increíble de humanidad, pero son muchas las discapacidades, son muchas las vulneraciones, y son muchas las personas con discapacidad que TIENEN VOZ y tienen que hacerla valer. nuestro lugar es educar eso. obvio es una imagen demasiado futurista.
EN FIN no todo en mi vida es amor paz y esperanza porque sino, no sería yo.
me gusta la esperanza
pero me saca un poco de quicio esta supremacía del AMOR
siento super válido el amor, osea, como impulsador de estas prácticas, pero, EL AMOR TODO LO PUEDE me parece un tanto falaz.
porque el amor no todo lo puede
los huecos que deja un estado ausente
el frio que descompone
la desnutrición
y las patologias que estas llevan
son agujeros que no tapa el amor
y me molesta este reduccionismo que insiste en dejarlo todo en manos del amor
porque el amor es un componente; no funciona por si solo
el amor está, y crea vínculos, es divino, todxs la pasamos hermoso; pero si la politica no está donde tiene que estar, el amor sobra pero no alcanza.
soy fiel creyente de que toda acción que nace desde la empatía lleva consigo una carga de divinidad y llega aún más que cualquier otra cosa
sé que cada cosa que hacemos repercute, bien o mal, en alguien.
y yo quiero repercutir bien, en la gente y el ámbito que me importa.
me interesa la educación, y sobre todo, los sectores más vulnerados en relación a esta misma. me interesa la gente, la gente que tiene hambre, que tiene frío, me interesa saber qué hacer, para que eso cese, por lo menos un poquito.
estudio para eso, literalmente.
me gusta esta esperanza que subyace en cada unx
me interesa revalidar a las personas con discapacidad como sujetos de derechos y, como todo ser habitante en la sociedad, sujeto POLÍTICO. me agota ver cómo vulneran sus derechos y, más aún, cómo son otrxs lxs que salen a pelear por ellxs: no está mal, obvio, es hermoso, divino, una muestra increíble de humanidad, pero son muchas las discapacidades, son muchas las vulneraciones, y son muchas las personas con discapacidad que TIENEN VOZ y tienen que hacerla valer. nuestro lugar es educar eso. obvio es una imagen demasiado futurista.
EN FIN no todo en mi vida es amor paz y esperanza porque sino, no sería yo.
me gusta la esperanza
pero me saca un poco de quicio esta supremacía del AMOR
siento super válido el amor, osea, como impulsador de estas prácticas, pero, EL AMOR TODO LO PUEDE me parece un tanto falaz.
porque el amor no todo lo puede
los huecos que deja un estado ausente
el frio que descompone
la desnutrición
y las patologias que estas llevan
son agujeros que no tapa el amor
y me molesta este reduccionismo que insiste en dejarlo todo en manos del amor
porque el amor es un componente; no funciona por si solo
el amor está, y crea vínculos, es divino, todxs la pasamos hermoso; pero si la politica no está donde tiene que estar, el amor sobra pero no alcanza.
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